Sorbete de yerbabuena
Y después de las exquisiteces de las milhojas, chipirones y demás excéteras, al degustar el sorbete de hierbabuena, entornas lo ojos y sientes las explosiones refrescantes de esta buena yerba y de la fresa que la acompaña como fuegos de artificio por todos tus paladares.
El nombre de la taberna sólo se lo debiéramos decir a los íntimos, y entre los íntimos, sólo a los que disfruten con el buen yantar.
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